Hoy los inmigrantes aportan capital humano, consumen servicios y productos, pagan impuestos, generan actividad económica y contribuyen con la innovación y creación, entre otras muchas cosas.
Nuestra ciudad de Puerto Montt sin duda está llegando a su colapso en infraestructura vial por el explosivo crecimiento de su población.
Continúa nuestra historia tras un largo año marcado por la pandemia mundial del Covid-19, donde nosotros como medio escrito regional, no estuvimos ajenos a los inconvenientes que esto ha producido en el país – el mundo y a nivel local.
Termina el mes de abril y se vislumbra el fin de la “Ley de Protección de los Servicios Básicos” que protegía a los clientes de cortes en los servicios
Al recorrer las playas de la capital regional Puerto Montt, nos podemos dar cuenta qué verdaderamente tenemos material en bruto.
Como un barco sin capitán ha transcurrido el mes de marzo, con una tripulación que solo vive el día y mantiene una navegación sorteando la tormenta que nos tiene al borde del abismo...
Pasan los meses y se elevan las temperaturas y fruto de esto afloran con mayor fuerza los malos olores de alcantarillado por la ciudad.
Desde el día viernes 11 de marzo asumió el nuevo Gobierno del Presidente Boric con sus nuevos integrantes, los que prometen un cambio radical en la política chilena.
Desde el inicio de la explosión de inmigrantes hacia nuestro país por las altas expectativas de futuro que presentaba nuestra economía creciente,
Llegamos a los últimos días del Gobierno saliente y el abandono por la clase media y trabajadora se nota por todos lados con el término de las ayudas Estatales.
El recinto y “Parque La Paloma” es uno de los pocos pulmones verdes y ecológicos de la ciudad de Puerto Montt, recinto en bruto y poco difundido