En el actual mundo competitivo, en donde cada consumidor tiene múltiples opciones para comprar y satisfacer sus necesidades,
cada empresa y sobretodo los emprendimientos a baja escala y la pequeña empresa, deben realizar una gestión que les permita diferenciarse y no sólo ser una opción más. Navidad es una oportunidad para ello. Pertenecemos al mundo occidental que celebra el nacimiento de Jesús y la invitación es adentrarnos allí.
La primera invitación es ver nuestra relación con una Persona muy importante: nuestros clientes, quienes son la razón de existir de la empresa, existimos gracias a ellos. Aunque suene de perogrullo decirlo, sin ventas la empresa no existe. Y las ventas se materializan en los clientes, nuestro norte es fidelizar clientes, es decir, clientes que nos compren, nos compren una, dos, tres veces… siempre, y nos recomienden. Y podemos identificar al menos dos herramientas comerciales en Navidad Marketing Directo y Mershandesing (Visual). En Marketing Directo, es un buen momento para saludar a su cliente, desearle una feliz navidad, quizás escribirle o llamarlo; quizás podemos apoyarnos en lanzar un producto nuevo y ofrecérselo para su compra, quizás podemos ofrecerle en promoción algún producto o servicio que al cliente le guste mucho o incluso regalárselo, o quizás sólo decirle que estamos donde siempre para atender sus necesidades … y Feliz Navidad. Desde el Mershandesing, vista su empresa de manera distinta para esta fecha, haga una puesta en escena atractiva, diferente, cálida … sorprenda a sus clientes.
Una segunda invitación es mirar hacia nuestro equipo de trabajo, que en una pequeña empresa muchas veces son dos, tres, cinco personas. Tal cual, son Personas. Son las personas que nos permiten hacer crecer nuestra empresa, son las personas que atienden a nuestros clientes y les resuelven sus problemas. No es hacer o no hacer una cena con el equipo de trabajo, evaluar o no la entrega de una Caja Navideña, algún regalo para sus hijos, evaluar un aguinaldo, hacer el amigo, secreto … Navidad es una oportunidad para generar la Cultura Organizacional necesaria para que exista un muy buen clima laboral que sea agradecido por nuestro equipo de trabajo y también por nuestros clientes. Es decidir acciones con sentido, no por cumplir, o porque todos lo hacen.
La invitación está hecha, les deseo una Feliz Navidad junto a su familia, y si tiene una empresa aproveche la oportunidad de encontrase con personas vitales para su crecimiento: sus clientes y sus trabajadores.
Y no olvide también, sea responsable financieramente en sus compras; no viva endeudado todo el 2018 por esta fecha.