“Como la Mona” de la Escuela Licarayén y “Nos Sentimos Bien” del Liceo Rural de Piedra Azul, fueron la obras.
Estas pertenecen al proyecto del Teatro Comunitario en el Barrio que se presentaron en la sala Mafalda Mora del Teatro Diego Rivera.
El objetivo del proyecto, que se realizó a través de un convenio firmado entre el Consejo de Cultura y la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Puerto Montt, consistió en la realización de talleres formativos vinculados al área teatral que se realizaron con estudiantes de la Escuela Licarayén, Liceo Rural de Piedra Azul y Colegio Darío Salas.
Con ello, se buscó fortalecer e incrementar el desarrollo de habilidades sociales, afectivas y artísticas que visibilicen el patrimonio inmaterial de cada sector por medio del quehacer teatral.
Jéssica Serón, coordinadora de fomento de las Artes Región de Los Lagos, dijo que “lo importante de esto es la articulación con organizaciones de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos rurales y urbanas. Lo importante son los procesos de cómo se generan herramientas en los sectores urbanos, junta de vecinos, para que la gente se apropie de sus sectores. Los niños siempre son las fuerzas de todo esto. Ellos tienen ideas, están llenos de energías y voluntad para participar”.
Octavio Gómez, encargado de la Comisión de Cultura de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos, señaló que “deseo destacar el compromiso con el que hemos podido enfrentar en conjunto con el Consejo de la Cultura y la Agrupación de actores de Puerto Montt. Y esto fue producto de un trabajo de diversas reuniones en la cual se le dio vueltas el desarrollar teatro. La idea es volver rescatar la identidad de los barrios, que la gente se identifique con algo que le es propio, como lo es la historia de sus barrios”
Cristina Soto, alumna del Liceo Rural Piedra Azul, dijo que “fue muy lindo. De hecho me sentí yo misma. Me pude liberar. Estaba concentrada y me esforcé mucho para que salga todo bien, me divertí mucho”.
Benjamín Castro, alumno de la Escuela Licarayén, indicó que “me gustó mucho, porque pude actuar. La obra se trataba de una mona que se encontró ropa de humano y se vestía como humano. Los demás monos se enojaron. La moraleja es que uno nunca debe tratar de ser lo uno no es”.
Bruno Alarcón, alumno del Colegio Darío Salas, sostuvo que “me pareció bien porque todos nosotros estábamos bailando, me gustaba el teatro desde muy pequeño. Ahora estar aquí me hace sentir mucha alegría.
Los organizadores evaluaron en forma positiva el proyecto que incluyó a alumnos de los tres establecimientos educacionales que administra el DAEM de Puerto Montt.